Cobijado en mil almohadas, bebiendo y bebiendo el silencio de dimensiones abismales. No poder mirar mas haya de la gran mano donde hoy doy vueltas, no poder ni siquiera sentir otra cosa que revoloteos en mis oídos. Vivir enjaulado en un mar de lágrimas del cual no se puede subir a la superficie. Dormir todas las noches pensando en que al parecer soy el mejor amigo que la luna podría tener, pero no quien la luna quiere tener.
A veces un día es suficiente para arriesgarlo todo, para tirar las flechas a donde ni los peses las encuentren, dejar todo como nunca ha sido, cambiar el cielo y volverlo fuego. Deseo dejar de ser la mitad de lo que soy Eris, deseo dejar todos esos platos rotos como solo madera, no quiero seguir volando en esta noche tan ardiente. Quiero ser de verdad.
Veo cada día que pasa a los hijos de la creación viviendo, sintiendo, amando. Quiero ser como ellos, no un ser tan absurdo como el que soy. No quiero detenerme en cosas eternas o duraderas, dame la capacidad de solo pensar en el momento como ellos. ¿Seria todo mejor así o no? (risas)
¿A caso un ser como yo no puede dar cobijo a algún hijo de la creación? ¿O es que ellos no quieren tener sin saber a alguien como yo?
Años tratando de caminar entre sus pechos y acariciar solo sus mejillas. Dame pies, Dame manos
No creo en lo imposible, no creo en lo prohibido, pero hoy me haces dudar.
si tan solo fuera fuerte como lo fui antes nada de esto seria así. Seguiría danzando entre rojas aguas, y alimentandome de solo mi aliento.
Si no hay palabras que alimenten mis anhelos, si no hay lenguas que saquen mis espinas de la boca, si no hay latidos en ese pecho para revivir mi corazón, mi esperanza, solo adormece de nuevo con aves mi sueño. No quites la mano de donde una vez mire. Pero deja caer el manto blanco para almidonar mi sereno.
Canta sorrento de fantasía, no dejare de escuchaste, pues es lo único que puedo hacer.
Un para siempre ama mía.
Desgarrame por ultima vez sin lastimarme.
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